Respirar ayuda a minimizar los problemas circulatorios.

Los sistemas respiratorio y circulatorio trabajan de manera orquestada, ya que cuando inspiramos , el aire llega a los pulmones, el oxigeno es transportado por las arterias a las células de los músculos; éstos toman el oxigeno y devuelven el dióxido de carbono, que es expulsado mediante los pulmones, este flujo constante y permante de sangre es posible por el trabajo de nuestro corazón. 

Adicionalmente, el sistema circulatorio transporta los nutrientes a las células y recoge los desechos metabólicos que han de eliminarse en los riñones, a través de la orina.

Por lo tanto, hablemos de aprender a respirar: 

•   El proceso de respiración debe llevarse a cabo a través de la nariz, aún cuando es posible respirar por la boca, debemos procurar siempre hacerlo de forma correcta por la nariz. 
•   Tomemos como norma realizar ejercicios para aprender a respirar, tomando unos minutos de tu día para inhalar por la nariz y llevar el aire a los pulmones lentamente y exhalar por la boca de igual manera. 
•  Realiza ejercicios aeróbicos que harán incrementar tu capacidad respiratoria, mejorando el flujo sanguíneo.
•  También te recomendamos  realizar yoga, ya que en cada sesión realizas ejercicios respiratorios haciéndote más consiente de ella.

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